El equipamiento de los parques infantiles debe diseñarse de modo que proporcione a los niños un lugar seguro y atractivo para jugar. Al fin y al cabo, pasar tiempo al aire libre e interactuar con los compañeros son elementos esenciales de un desarrollo sano. Por tanto, los equipos de juego se diseñan para fomentar la imaginación y la creatividad.
Para que sea completamente seguro jugar en un arenero, la arena debe estar libre de suciedad. Por desgracia, a menudo estos lugares están expuestos a excrementos de animales, así como a la suciedad que traen el viento o la lluvia. Ni que decir tiene, por tanto, que hay que hacer todo lo posible para evitarlo. El Inspector Jefe de Sanidad recomienda que los areneros o parques infantiles donde se encuentren estén vallados y también cubiertos por la noche y durante el tiempo en que no se utilicen. Así se evita que perros, gatos, pájaros u otros animales contaminen la arena. Además, las directrices establecen que la arena debe cambiarse al menos dos veces al año: antes del inicio de la temporada de verano y también durante la temporada de verano. También debe hacerse cada vez que se detecte que está contaminada. De este modo, el riesgo de infección por enfermedades parasitarias se reducirá al mínimo.
Una segunda consideración importante es también la calidad de la propia arena. No debe proceder de fuentes aleatorias, sobre todo porque debe tener
Jugar en el arenero es una forma excelente de desarrollar la creatividad, además de fomentar las buenas relaciones sociales. Por tanto, merece la pena asegurarse de que es totalmente seguro, a lo que contribuirá sin duda la limpieza de la arena.